martes, 10 de agosto de 2010

A Pedro Frías

A un año de tu ausencia Pedro Frías


…….”del amigo que es amigo siempre y cuando le convenga y sé que con mucha plata uno vale mucho mas, aprendí que en esa vida”……..así debe estar cantando Pedro Frías en el cielo o donde quiera que este.

Hace un año, justo un  11 de agosto, el que fuera en vida el presidente del distrito # 2 del Partido de la Liberación Dominicana, seccional del Bronx, y consejero en las Naciones Unidas, compañero Pedro Frías, partió de esta dimensión , fue una triste experiencia para los que con él compartimos el día a día , sobre todo en los menesteres políticos; no tanto así para otros, que quizá, mas que a su calvario, estaban atento a la posición que quedaría vacante; yo fui tal vez, quien menos compartió con él, pues su relación con otros compañeros fue más intensa, sin embargo y sin vanagloriarme, soy uno de los pocos, por no decir el único, que ha estado con muchos días de antelación, “sazonando” el día del aniversario de su partida, para que juntos, les hiciéramos aunque fuera un pequeño homenaje, pero de nada sirvió,  no hay tiempo para ti Pedro. Sé que algunos, envueltos en la maraña de sus responsabilidades y otros atosigados por los gajes que trae cada mañana, han olvidado el compromiso con la historia, historia que sería otra, si el difunto, hubiera sido un alto funcionario de estado, un general, un juez, o uno de los prominentes miembros del comité central; les aseguro que no faltarían las misas, las flores, los reconocimientos, los cristianos de pacotillas enviando oraciones por internet, lágrimas de hipocresía y discursos con repugnate olor a demagogia, pero no ; fue el siempre preocupado y  militante “compañerito” Pedro Frías quien merecía una "atencioncita" ante su funeral, para guardar las apariencias, pero no más.

En la gráfica Pedro Frías, mientras
escuchaba las palabras de Carlos
Sánchez en el cumpleaños
 de Jankarlos, en junio del
2008.
Me asalta la rabia y la impotencia. Hay que ver la eficacia y brillantez del desempeño de muchos, cuando un dirigente importante asoma en el Kennedy, no faltan quienes anden como perritos falderos en pos de captar la atención y hacer los amarres de lugar y no es que vea eso tan mal, lo que mi cerebro no procesa, son los alardes que se hacen de la solidaridad y las enseñanzas de Don Juan, para luego asumir posiciones que rayan en la mezquindad.

Hoy leeré en silencio, para ti Pedro, un poema que el día 12 del año pasado escribí en tu honor, como un diminuto pero, significativo homenaje a tu memoria.

¡Patria o muerte, nos vencieron!


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